Hay que revisar los amortiguadores a los 80.000 kms
Sábado, 23 de noviembre de 2024
Viernes, 06 de julio de 2012
La temporada de vacaciones es la temporada de los viajes. El coche debe soportar equipajes pesados, largas distancias, congestiones de tráfico, carreteras empinadas y caminos en malas condiciones, por ello, los expertos de ZF Services recomiendan llevar a los vehículos con más de 80.000 kilómetros a un taller especializado para revisar los amortiguadores.
Incluso el más mínimo daño causado por el impacto de una piedrecita, sedimentos, heladas, o simplemente por el desgaste causado por el tiempo puede conducir a situaciones extremadamente peligrosas, de ahí que una revisión antes de las vacaciones puede impedir incómodos contratiempos en las vacaciones. Los amortiguadores son los componentes del chasis que más esfuerzos deben soportar. Su principal función es amortiguar las vibraciones causadas por las irregularidades de la carretera. Si los amortiguadores no funcionan correctamente, las consecuencias pueden ser peligrosas.
Un mal amortiguador puede hacer que la distancia de frenado en carreteras bacheadas puede ser un 10% mayor. Por ejemplo, cuando se frena a una velocidad de 50 Km/h, puede significar que la distancia entre el vehículo y un obstáculo, y por lo tanto la separación de un posible accidente, sea hasta tres metros y medio más corta. Además, la reducción del rendimiento de la suspensión genera inestabilidad en las curvas y las ruedas pierden el contacto con el firme mucho antes. En carreteras mojadas la situación se vuelve aún más dramática, pues con los amortiguadores desgastados se produce más fácilmente el efecto del aquaplaning, lo que impide que el control del vehículo sea el adecuado.
Los sistemas electrónicos de ayuda a la conducción, como es el control del sistema de frenado antibloqueo (ABS), hacen que el conductor se sienta supuestamente más seguro. Sin embargo, la eficacia de todos estos sistemas modernos se reduce si los amortiguadores no pueden proporcionar un óptimo rendimiento y un correcto funcionamiento.
Los amortiguadores se desgastan poco a poco y sin avisar y, por esta razón, existe el riesgo de que la deficiencia se haga evidente sólo en caso de frenada de emergencia o al hacer maniobras bruscas para evitar obstáculos. Los expertos de ZF Services recomiendan que la primera revisión de la funcionalidad de los amortiguadores se haga a los 80.000 kilómetros, y después que cada 20.000Km se realice una revisión a fondo.
El punto crítico en la vida de los amortiguadores es a los 100.000 kilómetros o cuando tienen de cinco a seis años. Los amortiguadores, al igual que ocurre con los neumáticos, se desgastan de forma progresiva aunque con una clara diferencia, en los amortiguadores no puede verse el desgaste por la profundidad del perfil, como sucede con los neumáticos
Si hay que sustituir el amortiguador, hay que asegurarse de que se cambian ambos amortiguadores del eje. Esto es tarea del taller especialista. El profesional también sabe que en caso de cambio de un amortiguador, se deben comprobar también todos los componentes adicionales, tales como los soportes de suspensión. Un componente en mal estado puede causar los mismos síntomas en conducción que el amortiguador defectuoso en sí. Además, el amortiguador que acaba de cambiarse podría desgastarse mucho más rápido si ciertos componentes no se reemplazan.
ZF Services recomienda a los conductores que instalen amortiguadores Sachs y sus componentes adicionales en sus vehículos.
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Créditos d: Alex Guimerà & d: Marc Perez